El día 17 de septiembre está convocada una nueva jornada de huelga en contra de las medidas adoptadas por el Gobierno para el desmantelamiento del ferrocarril.

Es evidente que sólo a través de unas movilizaciones contundentes vamos a poder hacer frente a esta estrategia de destrucción de Renfe Operadora como operador público de referencia, pues los trabajadores estamos solos, ya que aquellos que deberían representar a la empresa defendiendo sus intereses, resultan ser los principales impulsores de su desaparición.

En los últimos días, hemos escuchado al Presidente de Renfe Operadora defender la bondad de que aquellos que estén interesados en participar en el transporte ferroviario cuenten con todas las facilidades y, que, en lugar de invertir en ferrocarril para generar actividad y buscar la obtención de beneficios a través de la misma, puedan disponer libremente de las inversiones que hemos financiado todos los ciudadanos para garantizarse esos beneficios sin ningún riesgo.

Todo ello, dicho por el máximo representante de la empresa, tiene un significado claro: ponemos esta empresa, sus activos, sus trabajadores, su imagen y su condición de prestadora de servicios públicos, a disposición de aquellos cuyo único interés sea ganar dinero sin riesgo y sin inversión y garantizándoles nuestra futura desaparición para que se queden con todo el pastel.

Estas medidas suponen poner en grave riesgo no sólo nuestras condiciones sociales, laborales y económicas, como ya se ha podido apreciar con la aplicación de las medidas aprobadas por el Gobierno, sino también nuestros puestos de trabajo y, por tanto, nuestro futuro.

Es imprescindible que todos vayamos a la huelga el día 17 de septiembre y que transmitamos con claridad el mensaje de que no vamos a permitir que destruyan impunemente aquello que tanto nos ha costado construir, como ferroviarios y como ciudadanos, con nuestro trabajo y con nuestros impuestos.

No podemos permanecer impasibles ante la situación actual, porque no es que nos juguemos mucho, es que nos lo jugamos todo.