Está claro que las acciones llevadas a cabo por S.E.M.A.F. han tenido un efecto importante, por el respaldo mayoritario con que se ha contado por parte de los maquinistas, que la Dirección de la Empresa no esperaba ni ha aceptado.

Lejos de sus previsiones, lo que verdaderamente ha ocurrido es que S.E.M.A.F. cuenta cada día en FEVE con un mayor respaldo por parte de los maquinistas, que están secundando todas las acciones planteadas a pesar de las piedras que tanto la Empresa como sus “colaboradores” van poniendo, una tras otra, en el camino.

En este sentido, la Dirección de FEVE ha apostado por una política de represión disciplinaria con objeto de intentar amedrentar a los maquinistas en el plano individual y, mucho nos tememos, tratando de buscar justificación legal para que la intervención de algún socio/aliado habitual no desprenda el tufillo de sus frecuentes pasteleos, trasladando a los juzgados la resolución e interpretación de aquello que, tanto en nuestra normativa como en el Reglamento de Circulación, está más claro que el agua.

Los compañeros expedientados a día de hoy por cumplir con las normas que nos son de aplicación como maquinistas de FEVE son ya 16, de estos, se quiera sancionar a uno con 60 días de suspensión de empleo de y sueldo, a cuatro con 30 días de suspensión de empleo y sueldo, estando pendientes de notificación el resto.

Esto no puede entenderse más que como una provocación: han optado por una represión propia de otro tiempo, actuando como el amo que fustiga al esclavo aplicando, en función de sus deseos y de la condescendencia del súbdito, el palo o la zanahoria y haciéndolo, por supuesto, en plaza pública para escarnio y escarmiento del fustigado y como aviso a navegantes para el resto del populacho.

Pero la realidad actual es otra y lo que ellos entienden como plebeyos a su servicio son un Colectivo Profesional que tiene definidos sus derechos y obligaciones y está organizado en torno a un Sindicato que tiene muy claro cómo defender a los profesionales de la conducción de agresiones que, como las que está sufriendo actualmente, son injustificables e inadmisibles, además de evidenciar el talante de los precursores de las mismas.

S.E.M.A.F. no va a permitir que esta actitud quede impune y llevará a cabo las actuaciones precisas en todos los ámbitos (sindical, ministerial, legal, empresarial) para evitar que nadie pueda continuar por este camino.